El Museo del Prado presume de sus tesoros en la reorganización de sus espacios. Para los responsables del museo, se trata de uno de los hitos más complejos y destacados del Prado, que ha afectado a la práctica totalidad de la planta principal. Los primeros tramos del amplio y luminoso eje del edificio Villanueva acogen ahora obras de gran formato que muestran la distinguida tradición pictórica con raíz en los maestros venecianos, Tiziano, Tintoretto y Veronés. Con ellos, Annibale Carracci, Diego Velázquez, Rubens y Van Dyck entablan un diálogo en el que se narran las conexiones, influencias, admiraciones y rivalidades entre artistas a través de más de un siglo.
Uno de los puntos más importantes de la Galería Central, en la que se exhiben 59 obras la mayoría de ellas de gran formato, es el eje en el que se pueden contemplar 'Carlos V en la Batalla de Mühlberg', de Tiziano, frente al icono del Prado, 'Las meninas' de Velázquez, y al fondo de la galería 'La familia de Carlos IV' de Goya
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