lunes, 19 de octubre de 2015

Titanic

La visita a la exhibición de Titanic es una travesía en el tiempo sumamente realista y emocionante. Titanic es un paseo guiado mediante una excelente audio-guía por la historia del buque transatlántico más famoso de la historia que se hundió el tercer día en su mismo viaje inaugural, el 15 de abril de 1912.


Durante algo más de una hora y de la mano del historiador Claes-Göran Wetterholm, con 30 años de experiencia en el estudio del Titanic, profundizamos en las vidas de los pasajeros y tripulación mediante un recorrido a media luz por las recreaciones de los pasillos y los camarotes de tercera y primera clase, la contemplación de fascinadoras fotografías del buque y de sus magníficas salas interiores, varias maquetas únicas, y una colección de más de 200 objetos originales de los supervivientes y los que fueron encontrados en el mar a la deriva tras el naufragio. 


A través de una recreación de la pasarela de entrada al buque, nos adentramos en una época donde las líneas navieras competían por construir los buques más grandiosos y exquisitos pues el beneficio económico de la actividad compensaba con creces estas millonarias inversiones. Era un tiempo donde viajar a América estaba al alcance de unos pocos, los obscenamente ricos y los soñadores acaudalados. El precio de un pasaje en tercera de 8£ equivalía a un año de alquiler para una familia en
Irlanda, o a los ahorros de 5 años de un profesional de clase media que tuviese el sueño de comenzar en un continente lleno de excitantes posibilidades.











En las postales que mandaron los pasajeros en la última parada antes del accidente podemos leer su entusiasmo y su estupor por la soberbia manufactura del navío. Muchas de estas cartas llegarían a su destino el mismo día que las noticias de su hundimiento.

Esta colección de fragmentos del pasado: los diarios, los ropajes, los distinguidos muebles y utensilios, o las joyas perdidas que encuentran dueño, narra historias humanas que consiguen hacernos empatizar con aquellas personas haciéndolas cercanas y fascinantes. Descubrimos que los personajes de la película más famosa sobre esta tragedia existieron… pero su historia es muy distinta de aquélla con la que el director James Cameron con una desmedida imaginación nos sedujo en 1997.

Sólo hubo 712 supervivientes entre los 2.207 pasajeros que gracias al oficial de mando en el momento de la colisión, William Murdoch, sumaron un 50% de hombres pues nos enteramos que él prefirió llenar los botes de proa con cualquiera que estuviese preparado a seguir la práctica de la tripulación de popa por la que mujeres y niños debían evacuarse primero.



Este hecho llevó a parejas, como el filántropo Isidor Strauss y su mujer Ida, y familias enteras como los Goss junto con sus cinco hijos, a decidir permanecer juntos a bordo antes que separarse aquella terrible noche fría e incierta. La última vez que vieron con vida a Isidor e Isa fue en una tumbona de la cubierta, abrazados. Por su parte, la señora Goss tuvo que presenciar con horror cómo finalmente su familia se dividía cuando sus dos hijos menores y ella eran lanzados por miembros de la tripulación a los últimos sitios de un bote ya en el agua mientras la otra mitad de su familia permanecía a bordo. El cuerpo de su marido sería encontrado con su reloj parado a la hora exacta en que entró en contacto con el agua helada del Atlántico. 

Otra historia conmovedora es la de la pareja de amantes Kate Phillips de 19 años y su empleador en una tienda de confección Henry Morley de 42, quienes escaparon bajo nombres falsos para emprender una nueva vida en América. Henrry pereció, Kate sobrevivió y dio a luz a una niña nueve meses después.

Han pasado algo más de cien años pero de los anales del siglo XX se conservará imborrable la trágica historia del Titanic pues tal y como comentaba sutilmente el señor Wetterholm “al final la naviera White Star Line tenía razón al afirmar que el Titanic era un buque insumergible”.

Escrito por: Ana García Rodríguez
Fotos: Zuzana Svak

jueves, 15 de octubre de 2015

“LATEИTE“

MONDO GALERIA presenta "Latente", nueva exposición de Martín Sampedro en la que el artista investiga, a través de nuevas tecnologías, el futuro de la fotografía. A través de un concienzudo homenaje a los albores del medio y a sus grandes maestros, Sampedro desarrolla una cosmogonía propia en busca de revelar(nos) un nuevo mundo que yace oculto entre métodos de creación que al parecer son lejanos a lo humano y sin embargo, tan intrínsecos a la forma en que genera imágenes nuestra mente.

Treinta fotografías presentan la iconografía creada por Martín Sampedro a partir de ideas y retornos de su memoria con los que nos invita a descubrir un mundo oculto y sorprendente a través del cual vislumbramos su profundo estudio de la luz, de la forma y sobre todo de la Fotografía como lenguaje. 

                                                     (Foto: la cortesía de Mondo Galeria)

Con esta colección el artista rinde su homenaje a la fotografía; y utilizando nombres de la mitología griega para sus personajes genera un guiño entre la cultura del pasado y la actual, entre la cercanía y el enfrentamiento de Grecia y Europa.

Si bien las imágenes resemblan retratos clásicos, en los que se investiga tanto la belleza como el erotismo, la exposición añade un punto interactivo al visitante en el que el doble juego de imagen latente y presente se descubre con una simple aplicación que uno puede descargar gratis en su teléfono móvil y que al enfocar sobre la imagen la lente del mismo este nos revela lo que hay más allá del papel impreso.


Lugar:

MONDO GALERIA 
C/ San Lucas 9
28004 - Madrid


Horario: 
Martes a Viernes- 11h a 14h y 17h a 20.30h Sábados- 11h a 14h